Friday, July 14, 2006

Dia 80. Coron-Puerto Princesa. Filipinas

Dia 80 Sabado 8 de Julio Coron-Puerto Princesa. Filipinas

Hoy hay poco q contar, el dia paso viajando. A las 7:30 cogimos un ferry hacia Puerto Princesa. El puesto de seguridad era un poco de coña. Nos hicieron poner todas las bolsas en linea y un perro iba oliendo, seguramente para ver si habia drogas o explosivos. Luego habian unos q te 'cacheaban' y pasaban el scaner por las bolsas; si alguien daba un poco la vara, pasabamos sin ser escaneados. Y finalmente otro en la escalera te chequeaba mas bien para magrear a la gente y hacer el show como los compañeros. Lo q suponiamos q serian habitaciones, eran solo compartimentos divididos por 'paredes' de no mas de 1'70 metro en una habitacion enorme. Si te levantabas un poco en la cama superior veias toda la habitacion con la gente. Y como no, nos miraban todos por ser los unicos extranjeros en el barco excepto un rambo de 50 años (no le vimos con ninguna filipina, seria maricon, de hecho tenia pinta de ser un oso). Elena y yo dimos una vuelta por el barco y pudimos ver q el restaurante-bar-karaoke estaba al lado nuestro, los de clase superior arriba y los de inferior, sin aire acondicionado, abajo. El barco era enorme y se veia con mucha gente, aunq no en nuestro espacio. Como no habia nada q hacer, almorzamos unas latas y nos echamos la siesta despues de ver una especie de simulacro de seguridad q daba risa. Dormimos un monton porq nos despertamos, comimos algo y ya estabamos llegando a Puerto Princesa. Me parecia q veniamos en uno de esos cruceros de 'vacaciones en el mar' porq nos recibieron con musica de banda. Y una cola de taxistas. No cogimos ninguno porq el hotel estaba a 150mts. No nos gusto el hotel porq era caro y nos intentaban meter a tres en un espacio de dos justos. El de al lado era mas barato y mas cutre y cogimos un triciclo-taxi hacia un hotel inexistente. El taxista lo busco pero nada, decidimos quedarnos por ahi cerca y al final, tras hora y pico moviendonos encontramos uno decente, q por cierto, nos enteramos luego, el dueño es un actor famoso de Filipinas; un chaval jovencillo q no parece filipino para nada, me parecio un turista como nosotros. Se nos hizo tarde pero a Elena y Jose les dio tiempo de mirar tiendas. Cenamos en un restaurante pequeño pero muy bueno y a internet y a dormir. No mucho, aqui cuando se viaja se dedica un dia para ello y la otra parte en buscar algun sitio barato y bueno para dormir. Como en la mayoria de paises, la calidad precio no van siempre unidas.

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