Thursday, March 08, 2007

Calafate, Argentina

5 Feb

No tan pronto, a las 12 y media, teníamos el autobús para Calafate, a unas 5
horas de Rio Gallegos. Allí llegamos con ganas de dejar las cosas en el
hotel y organizar las diferentes excursiones. De paso a nuestro hostel
pasamos por el Youth Hostel donde se suponía q se reservaba por email q
contestaron mas tarde, era una cabaña muy chula.
Nuestro hostel, por desgracia, era una mierda 'Mochileros' y el q nos
atendió era un gilipollas q nos puso en la peor habitación. Al final nos
cambió a otra un poco mejor. Parecía q tenía algo contra los españoles. Por
supuesto no le compramos ninguna excursión a él por su simpatía.
Así q en el Youth hostel vimos q organizaban excursiones y ahí mismo un tio
con un palique impresionante, nos organizó los próximos días hasta Puerto
Arenas, Chile. Un genio y un estúpido a la vez porque nos gastamos una pasta
con él y no fue ni capaz de llamar a Chalten para reservarnos tres camas,
luego supimos q sí q lo hizo a las chicas de delante nuestra. Y es q en
Argentina hacen las cosas si les parece bien y les caes bien.
Ya nos veis llamando a diferentes alojamientos q estaban llenos excepto uno
q, como no, no reservaban por teléfono, solo por agencia a la q nos tocó ir.
Ojo al dato, la agencia reservaba con ellos por el Chat de Internet! Y es q
Argentina es un país de incongruencias y tonterías como esa.
En resumen, reservamos todo para los próximos 4 días!
Con lo q nos gastamos en 30 minutos en la agencia no nos apeteció gastar mas
en el hotel y nos compramos la cena para hacer en el hotel donde conocimos a
3 chicas españolas muy simpáticas y graciosas. Como no, habían vivido en
Londres!. Nos pusimos hasta las tantas de charla con ellas, un argentino y
el imbécil de recepcionista al q nadie hacía mucho caso.

6 Feb

A las 7:15 se suponía q estarían recogiéndonos y tendríamos el billete de
barco en recepción. Ni una cosa ni la otra, nos tocó ir al Youth Hostel a
coger el boleto y prender el colectivo.
Hora y pico para llegar al puerto donde pagamos por entrar al parque
nacional y nos metimos en el barco los primeros para estar en primera línea
y ver todo perfecto.Pero como no todo puede ser perfecto, teniamos al lado a
un niño impertinente q no paró de dar por culo todo el viaje y encima me
llamaba 'Señor pequeño', Aggggg!!!
El paisaje era buenísimo, íbamos por un lago hasta meternos por un brazo del
lago y empezar a ver enormes rocas de hielo, tímpanos, q hacía escasos días
se habían desprendido del glaciar Upsala.
Primero vimos un glaciar q se había retrocedido hasta la cima de la montaña
y luego otro con nombre italiano al q no nos pudimos acercar mucho, estaba
lleno de tímpanos. Vimos como uno enorme de rompía y daba la vuelta hasta
coger el equilibrio de nuevo, impresionante!.
Otra hora y pico por el lago hasta al glaciar Upsala al q no pudimos
acercarnos porque se había desprendido todo el frente dos días antes y
estaba todo lleno de tímpanos. Y de ahí a hacer una excursión de hora y pico
por un bosque donde comimos.
Cenamos en un buffet de carne y ensalada, demasiado. Jose se conformó con un
pure de patata y huevos fritos, pero Elena y yo salimos con varios kilos de
mas. Espero q cuando vuelva a Valencia/Londres me saqueis mucho a pasear
para perderlos!

7 Feb

Por suerte la excursión de hoy empezaba a las 8:15, aunque los gilipollas
del hostel nos tocaron un poco los huevos, y es q los argentinos en
servicios son unos estúpidos para el cliente, van de sobrados. Muy bordes,
mentirosos y altivos. Y con todo el mundo sin excepción.
En bus nos llevaron a Perico Moreno, IMPRESIONANTE!. Hicimos una excursión
de hora y pico para ponernos enfrente del glaciar. BUENISIMO!! Gigantesco!
Se lo recomiendo a todo el mundo, es emocionante ver tanto hielo enfrente,
un rio de hielo!. A parte de q te quedas bobo mirando como caen esos trozos
gigantes de hielo al agua. Se puede estar horas y horas ahí y no cansarse de
mirar. Las fotos no pueden decir mucho.
Elena agarró un barco para pasearse mas cerca del glaciar, nosotros
decidimos q no.
Se nota q es un sitio mundialmente conocido, estaba lleno de europeos, no
mucho israelí como suele haber en los hostales, será q lo 'cultural' no es
lo suyo.
Volvimos a Calafate para coger el autobús al Chalten, 4 horas y pico de
viaje. La parada en mitad, en 'las leonas' fue un buen punto: era una
pastelería en mitad de la nada llevada por mujeres, muy autentico.
Llegamos a las 10:30 al Chalten, a un hostel sin luz en recepción y nos tocó
en la habitación con las dos argentinas q encontrabamos en todas las
excursiones: Eugenia y Ana. Muy buena gente.

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