Singapore
8 NovOtro día de viaje hacia Singapore, q es el pico de la península Malaya.
Primero un barco q tardó 2-3 horas a Mershing, la costa malaya. De allí,
tras esperar varias horas q nos dio para desayunar y algo de Internet a
velocidad ultra lenta, nos metimos en otro autobús q en 4-5 horas llegó a la
frontera de Singapore. País en el que esta totalmente prohibido el chicle
porque es una ciudad ultra limpia.
En la frontera el pasaporte de Elena se rebeló y no quiso ser leído para
nada. Le tocó pasar a Elena a oficinas para ver q hacían con ella. Por
suerte no fue mucho pero lo suficiente para q nuestro autobús nos dejará
tirados y le pasara el muerto a otro autobús. A punto de no coger este
tampoco estuvimos.
La estación de autobuses estaba lejos del centro y ahí nos veis a nosotros
intentando ver q autobús de línea nos venía bien y buscar cambio porque sino
no entras.
Fuimos al YHCA, q se supone es de jóvenes, de ahí el nombre: Asociación de
hostels para jóvenes católicos, pero q estaba lleno de la tercera o cuarta
edad. Un sitio idóneo para hacer amigos!. Para colmo nos tocó en la
habitación un gringo de una religión desconocida q estaba en Tailandia
lavando la cabeza.
Lo bueno: q tenía piscina arriba, en la terraza. Y para colmo, un centro
comercial enfrente tenía wifi con Internet gratis!. Allí nos veis el resto
del día (q no era mucho) cenando y cerrando el local, conectados a Internet.
Eso si, hicimos algo de turismo por la calle Orchard, una calle muy pija
donde están las tiendas y hoteles caros.
9 Nov
Y como yo estaba muy enfadado con 'Creative' y tenía q contactarles, por la
mañana nos fuimos a un centro comercial a hablar con ellos. Estaban cerrados
y aprovechamos para ver la 'Esplanade', un centro cultural-opera, un
edificio chulísimo por fuera, por dentro poco pudimos ver.
De vuelta a 'Creative' me mandaron a la central, fuera de la ciudad, y todo
enfadado nos fuimos a comer y mientras Jose y Yo nos ibamos al quinto coño,
Elena se fue a hacer turismo.
Al menos el metro llegaba cerca, a 15 minutos andando. Y allí nos plantamos
poniéndoles a parir por el servicio. Tras negociarlo, me dieron un nuevo mp3
player con más capacidad aunque me toco pagar un extra. Al menos uno nuevo!
Quedamos con Elena en el barrio chino q a Elena no le gustó mucho y q
nosotros pasamos de ver. Así q nos fuimos de vuelta al hotel andando y vimos
un centro de ocio en el rio, lleno de restaurantes, tiendas y demás.
Gracioso el sitio pero caro. Y es q Singapore es caro, nada de restaurantes,
solo sitios de comida rapida y barata. Por suerte los centros comerciales
tienen una planta de eso y ahí era donde nosotros nos dirigíamos cuando
teníamos hambre.
10 Nov
Y es q los de 'Creative' son chapuzas, al día siguiente me toco volver
porque se me jodió de buena mañana el nuevo placer!
Esta vez fui yo solo al quinto coño después de fuéramos a un centro
comercial tecnológico q no nos impresionó nada: esta de moda los móviles,
las cámaras digitales y poco mas. Nada nuevo.
Hablé con la misma chica y les puse a parir, no era normal. Me sacó hasta al
jefe para meternos en una oficina para q no se enterase la gente. El jefe
entró en razón, me lo volvieron a cambiar y me regalaron otro mp3 antiguo q
a Jose le viene muy bien. Ya sabeis, si veis 'Creative' Correr!!
Quede con ellos en el centro comercial de enfrente del hotel y nos dimos una
vuelta por ahí. Intentamos subir a una torre desde la q se ve todo Singapore
pero te cobraban la consumición mínima en la base de la torre y no era nada,
nada barata. No me acuerdo mucho, pero rondaba las 30 libras, 50 euros. Nos
conformamos con dar una vuelta por el paseo marítimo donde apreciamos como a
los indios les gusta bailar lo q sea y sin vergüenza.
11 Nov
Ya era nuestro último día aquí. Nos habíamos gastado una fortuna y es q es
cara la ciudad. Esta hecha para gente q viene con el bolsillo lleno. Por
supuesto q caímos y nos compramos la funda de la cámara digital para hacer
fotos bajo el agua.. q pronto empezaremos a mandar!
Por la mañana vimos un museo q estaba dentro del circuito de la bienal y q
no me dijo nada de nada. Y bajo la lluvia, con plásticos como impermeables,
nos fuimos a coger el autobús de regreso a Kuala Lumpur. Nos salía mucho mas
barato volar desde allí a Indonesia.
Llegamos tarde y quedamos con Pascal (el belga) para tomar una copa en una
zona de moda para después coger un taxi e irnos al aeropuerto a dormir para
coger el avión de buena mañana al día siguiente.
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